Sepsis Pediátrica
«Kabla Diagnósticos»
Con mótivo del reciente Día mundial de Sepsis, nos gustaría compartir la siguiente publicación relacionada a la Sepsis Pediátrica.
Autor: Shankar Santhanam, MD; Chief Editor: Russell W Steele, MD


Sepsis
La sepsis pediátrica generalmente se considera que comprende un espectro de trastornos que resultan de la infección por bacterias, virus, hongos o parásitos o los productos tóxicos de estos microorganismos.
El reconocimiento temprano y la intervención claramente mejoran el resultado para los lactantes y los niños con condiciones que conducen a la sepsis.
El espectro de la sepsis abarca desde la invasión microbiana del torrente sanguíneo o la intoxicación con signos precoces de compromiso circulatorio, incluyendo taquicardia, taquipnea, vasodilatación periférica y fiebre (o hipotermia) hasta el colapso circulatorio completo con síndrome de disfunción de órganos múltiples (MODS) y muerte (vea la imagen abajo).
Patogénesis de la sepsis y disfunción de múltiples órganos.
Signos y síntomas
Obtener una historia completa como parte de la evaluación para la posible sepsis. Los síntomas que se pueden observar son los siguientes:
- Fiebre (síntoma más común de presentación de niños con síndrome de respuesta inflamatoria sistémica [SIRS]).
- Taquicardia.
- Respiración rápida o dificultosa.
- Extremidades frescas.
- Cambios de color.
Lo siguiente debe ser consultado en:
- Exposiciones a enfermedades infecciosas y otras fuentes de insulto.
- Nivel de actividad.
- Estado mental (relativo a la edad).
- Producción de orina.
- Inmunizaciones.
- Alergias a medicamentos.
Realizar un examen físico completo. Los hallazgos que reflejan la sepsis pueden incluir lo siguiente:
- Los sutiles cambios en los signos vitales (a menudo los primeros indicadores de SIRS inminente).
- Hipotensión, cambios en el estado mental y anuria (signos tardíos).
- Hipotermia (a menudo más ominosa que la fiebre).
- Localización de signos de infección.
Diagnóstico
Los estudios de laboratorio que pueden ser útiles incluyen los siguientes:
- Recuento sanguíneo completo (CBC).
- Medidas de la función de coagulación y parámetros de coagulación.
- Niveles de electrolitos.
- Pruebas de función renal y hepática.
- Serologías específicas de la etiología.
- Análisis de orina.
- Pruebas de marcadores inflamatorios y reactivos de fase aguda.
- Cultivo de sangre, orina, líquido cefalorraquídeo (LCR) u otros tejidos.
Otros estudios que pueden ser considerados, dependiendo del contexto clínico, son los siguientes:
- Radiografía de tórax.
- La tomografía computarizada (TC).
- Imágenes de resonancia magnética [RM].
- Ecocardiografía.
- Punción lumbar para la evaluación del LCR.
Administración
El enfoque inicial del tratamiento es la estabilización y corrección de las alteraciones metabólicas, circulatorias y respiratorias, que pueden incluir lo siguiente:
- Resucitación agresiva de líquidos y soporte del gasto cardíaco.
- Soporte ventilatorio con oxigenoterapia complementaria.
- Mantenimiento de la concentración adecuada de hemoglobina.
- Corrección de trastornos fisiológicos y metabólicos.
- Monitoreo de la producción de orina y otros órganos terminales.
Los agentes antimicrobianos deben administrarse lo antes posible, según los patógenos más probables. Los siguientes tratamientos son comúnmente empleados:
- Recién nacidos y lactantes en las primeras 6-8 semanas de vida: Ampicilina y gentamicina, ampicilina y cefotaxima, o ampicilina y ceftriaxona.
- Niños mayores y niños con sepsis de etiología poco clara: cefalosporina de tercera generación más vancomicina. Añadir clindamicina si S aureus o GABHS son posibles etiologías.
- Pacientes que tienen catéteres en reposo o aquellos que tienen un alto riesgo de infección por Staphylococcus aureus resistente a la meticilina (MRSA): Como anteriormente, con la adición de vancomicina.
- Pacientes con fiebre y neutropenia: Cobertura de amplio espectro con énfasis en barras Gram-negativas.
La intervención quirúrgica (eg, drenaje del absceso o acceso venoso) se requiere ocasionalmente.
Las terapias complementarias pueden ser consideradas, incluyendo las siguientes:
- Óxido nítrico inhalado.
- Oxigenación de la membrana extracorpórea.
- Corticosteroides.
- Pentoxifilina.
- La inmunoglobulina intravenosa (IVIg).
- Terlipresina.
- Lactoferrina bovina.
Generalmente, estos pacientes no deben ser alimentados hasta que la hipoxia intestinal y la hipoperfusión hayan sido excluidas. Una vez que la alimentación pueda comenzar con seguridad, la nutrición que mejora el sistema inmunológico puede reducir la mortalidad.
NECESITO PRUEBA RÁPIDA DE DENGUE DE ENTIMOVIROLOGIA
PARA EQUIPO RAMP READER CAJA CON 100 PIEZAS