¿Què es la resistencia a los antimicrobianos?
La resistencia a los antimicrobianos (RAM) es una amenaza global para la salud y el desarrollo, que requiere medidas urgentes y multisectoriales para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible. La RAM es una de las principales amenazas de salud pública identificadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), y se debe principalmente al uso indebido y excesivo de antimicrobianos, así como a la falta de agua limpia y saneamiento adecuados y al control inadecuado de las infecciones.
La RAM tiene costos económicos significativos, prolonga la duración de las enfermedades y aumenta la necesidad de medicamentos más caros y hospitalizaciones más largas. Sin antibióticos eficaces, los resultados de la medicina moderna se verían comprometidos, especialmente en casos de cirugía mayor y quimioterapia contra el cáncer. Los patógenos farmacorresistentes se vuelven más difíciles de tratar, lo que aumenta el riesgo de propagación de enfermedades y la mortalidad. La RAM también tiene costos significativos para la economía y la productividad de los pacientes y sus cuidadores, y es especialmente problemática en países con sistemas de atención de salud limitados.
Su resistencia y la tuberculosis
La resistencia a los antibióticos de Mycobacterium tuberculosis es una amenaza para la lucha contra la tuberculosis a nivel mundial. En 2018, se detectaron aproximadamente medio millón de nuevos casos de tuberculosis resistente a la rifampicina, y la gran mayoría de ellos eran multirresistentes, lo que requiere tratamientos más prolongados, menos eficaces y más caros que los de la tuberculosis no resistente. La resistencia a los antivíricos también está aumentando, especialmente en pacientes inmunodeprimidos.
La aparición de virus y parásitos farmacorresistentes es una de las mayores amenazas para el control de enfermedades como el VIH y el paludismo. La resistencia a los fármacos aumenta la dificultad en la selección del tratamiento adecuado y requiere un seguimiento estrecho. También tiene importantes repercusiones económicas, ya que los regímenes de segunda y tercera línea son mucho más caros que los fármacos de primera línea. Se está observando un aumento en la prevalencia de infecciones fúngicas farmacorresistentes, lo que empeora una situación terapéutica ya difícil.
La farmacorresistencia de Candida auris es cada vez más generalizada y se tiene constancia creciente de su resistencia a múltiples antifúngicos. Esto dificulta el tratamiento de las infecciones fúngicas, llevando a fracasos terapéuticos, estancias hospitalarias más largas y opciones terapéuticas más caras. La RAM es un problema complejo que requiere un enfoque multisectorial unificado. Se necesitan más innovaciones e inversiones en investigación y desarrollo de nuevos medicamentos antimicrobianos, vacunas y medios de diagnóstico.
Además, se requieren iniciativas a nivel global, como el Plan de Acción Mundial sobre la Resistencia a los Antimicrobianos (PAM), para garantizar el progreso sostenible y la financiación de planes de acción nacionales en diferentes sectores. La OMS colabora estrechamente con la FAO y la OIE en el enfoque «Una Salud» para promover prácticas óptimas que permitan reducir la RAM y ralentizar su progresión.
EL GLASS
El GLASS, que es el Sistema Mundial de Vigilancia de la Resistencia a los Antimicrobianos y de su Uso, fue lanzado por la OMS en 2015 con el propósito de mejorar la comprensión y orientar las estrategias relacionadas con la resistencia a los antimicrobianos. Este sistema incorpora progresivamente datos sobre la vigilancia de la RAM en humanos, el uso de medicamentos antimicrobianos, y la resistencia a los antimicrobianos en la cadena alimentaria y el medio ambiente.
GLASS proporciona un enfoque normalizado para la recopilación, análisis, interpretación e intercambio de datos por los países y zonas, y permite supervisar la situación de los sistemas nacionales de vigilancia. La OMS estableció la lista de patógenos prioritarios en 2017 para guiar la investigación y el desarrollo de nuevos antimicrobianos, medios de diagnóstico y vacunas. La Alianza Mundial para la Investigación y Desarrollo de Antibióticos (GARDP) es una iniciativa conjunta de la OMS y la Iniciativa Medicamentos para las Enfermedades Desatendidas (DNDi) que fomenta la investigación y el desarrollo mediante alianzas público-privadas. GARDP tiene como objetivo desarrollar y distribuir cinco nuevos tratamientos para las bacterias farmacorresistentes identificadas como las de mayor amenaza por la OMS antes de 2025.